Magda Sayeg, cuando el tejido se convierte en arte

Magda Sayeg de  37 años, trabaja en su casa de Austin, donde vive con sus tres hijos, su hermano y un bulldog blanco llamado Stella. Se levanta cada mañana alrededor de las 4:30 o 5, juega al Scrabble online en su iPad que le aviva su cerebro y bebe dos tazas de café, poniéndose a trabajar antes de que sus hijos se despierten

 Pasa la mayor parte de su jornada de trabajo en su oficina, que está llena de coloridas colecciones: arreglos de flores frescas, jarras vintage, gnomos, muñecas rusas y montones de trabajos en ganchillo afganos, los cuales le sirven como inspiración para las mezclas de colores en su arte.

No quiso seguir con la costumbre de tejer medias, sueters. Admite no ser experta en tejido

Ella comienza un proyecto mediante el estudio de la pieza a ser cubierta.

 Su inspiración son los colores de los años 60 y 70.

En casi todos sus trabajos incorpora el fucsia.

 La mayor parte de su trabajo de diseño es realizado en su computadora.

 Prefiere trabajar con hilo acrílico porque sus colores son más brillantes y menos costosos.

Trabaja el diseño con su equipo de hilanderos en telares que pueden producir unos 5 pies de tejido por hora. Cuando llega el momento de instalar la obra, reúne a voluntarios locales y amigos para cortar y pegar la knitwork.

¿Querés conocerla?

Creo que vos serías capaz, por lo menos, de realizar el trabajo con clavos y lanas.
Yo me anoto en todos, siempre que otros tejan por mi.
 Total, ella es famosa y hace eso.